La madrugada y el camino conjugan el ambiente preciso para el trance. Entre fugaces fantasmas las luces se reflejan a veces en objetos artificiales, otras en extraños cuerpos que atraviesan la carretera a gran velocidad, dejando apenas una silueta perceptible en una estela de luz que se difumina al tiempo que la vamos percibiendo.
Son las interminables horas sentados en la misma posición la que nos orillan a imaginar las diferentes realidades que nos rodean. México es un país de contrastes en los diferentes niveles de pobreza que lo componen, casi tan diversa y cambiante como los ecosistemas de los que entramos y salimos a lo largo del trayecto, casi tan cambiante que a veces se nos olvida que está, de no ser por ese momento en el que nos llega y duele.
Viajar de noche es un convite para el relax, al parecer nada perturba la quietud que reina en lo profundo del paisaje y la oscuridad extiende su manto por todos los rincones que toca, como si fuera un líquido que toma la forma del recipiente que lo contiene. Sin embargo esa aparente calma es un anzuelo para caer en el descuido. Uno tiene que ir muy alerta, pues de entrada las cosas no parecen ser lo que son y todos los gatos son pardos. Es el doble juego en el que se colapsan las horas.
Fad Gadget – Collapsing New People
A veces luces de gasolineras, a veces los reflectores de las casetas, a veces las torretas de las patrullas que anuncian el siguiente retén. Así la noche sigue atestiguando el giro de la Tierra, que como aquellas infinitas hileras de trailers, atraviesan de principio a fin la eterna rueda del día y la noche, siempre por la misma ruta, siempre en la única fila que solo se rompe cuando las máquinas se estrellan desgañitándose en metálicos gajos y fierros retorcidos, como nuestras propias mentes.
Un perro despavorido irrumpe la penumbra de entre los matorrales. Le partimos la cabeza a más de 120 km/h. Nada había que hacer por el pobre animal, se fue al instante. En la siguiente caseta advierten que el auto está chocado y no llevamos una luz delantera, a lo que contestamos relatando el suceso, no nos creen y nos ponen una multa, como si fuera poco el cargo de conciencia, se le suman $870 pesos para que no nos podamos deshacer tan fácil de los fantasmas que acarrearemos hasta romper el alba.
The Legendary Pink Dots – Straight On’til Morning
Medio traqueteados seguimos rodando el asfalto mientras nos vamos turnando el puesto de copiloto, quien tiene la misión de mantener despierto a Pino (nuestro sagaz piloto) ofreciéndole chucherías (café, agua, galletitas, caramelos, esporádicos toques, taurina y altas dosis de azúcar), haciéndole la plática, cambiando los discos cuando se acaban, revisando el mapa y estando al tiro mientras el resto del equipo se duerme en las posiciones más incómodas que se puedan imaginar. El auto es un basurero que poco a poco se irá destruyendo pues el camino todo se lo lleva con su implacable fricción.
The Residents – A Spirit Steals a Child
Así la temperatura comienza a contrastar el gélido viento que sopla afuera, con el corpóreo calor generado por gases, exhalaciones y todo eso que apesta a vida. Poco a poco los diferentes tonos de oscuridad comienzan a develar los juegos que la refracción de la luz provocan en nuestros ojos engañando al cerebro. El horizonte clarea a la lejanía, en la hora más tensa para quien no ha dormido: Ese amanecer que está ocurriendo constantemente a toda hora en algún lugar del planeta… lo mismo para la noche. Hemos llegado a nuestra siguiente parada en este viaje del que nunca hubo un destino trazado ni definido, apenas nos aventamos hacia la carretera con el ímpetu de nuestros 23 años y el sueño de alcanzar la Baja. Encontramos un motel de mediana pinta junto al camino, el sol asoma ya su cálida faz, nosotros nos entregamos plenos a las almidonadas y lisas sábanas del cuarto. Es hora de decir buenas noches.
Mississippi John Hurt – Goodnight Irene
Ale Guerrero (México, 1984). Psicólogo músico, melómano y conductor de radio. Alejandro Guerrero AKA elAle de la Portales forma parte de las bandas Belafonte Sensacional y Pobre Diablo. Conduce desde hace más de un lustro el programa La Hora Dada, por NoFM-Radio.